Uno de los expertos más conocidos en el mundo cafetero, el brasileño José Braz Matiello, visitó El Salvador para capacitar caficultores en el manejo de las enfermedades que atacan esta planta y ha visitado fincas para conocer la realidad de la caficultura salvadoreña, duramente afectada por la roya.
Este 9 de abril, el investigador brasileño compartió con los cafetaleros sus conocimientos en el combate de las enfermedades del café y sobre la experiencia brasileña que logró sobreponerse al impacto de la roya y duplicar su producción.
“Creo que la roya y también la broca son problemas que van a seguir por toda la vida, porque son problemas permanentes, hemos tenido esto en Brasil ya por 44 años, trabajamos duro y doblamos la producción de 22 millones hoy estamos en casi 50 millones de quintales en este período, no es un impedimento”, dijo el investigador.
El Ministerio de Agricultura y Ganadería ha reconocido que la infección de la roya del café alcanza un 40% y de acuerdo al estudio “Evaluación rápida sobre el efecto de la roya del café en poblaciones vulnerables dependientes del sector en El Salvador”, realizado el año pasado por el Programa Mundial de Alimentos, se estima que para la próxima cosecha 2013-2014 la producción nacional podría reducirse a 1.2 millones de quintales oro uva como máximo.
“Acá veo que la productividad, como nos informaron unos técnicos en unas fincas, está por cuatro o cinco sacos de café oro, 60 kilos por hectárea. Esta es una productividad muy difícil para traer retorno al productor”, indica Matiello.
A la vez recomienda que en El Salvador, demás de combatir la roya, fuera conveniente manejar las plantaciones de una mejor manera, agrega que es posible recuperar la caficultura, pero se tiene que trabajar mucho, impulsando un programa a nivel nacional con el gobierno y los caficultures para cambiar los métodos de trabajo para pasar a una manera profesional de producir.
“La condición de suelo y el clima acá es muy favorable, tiene suelos buenos, y aunque tiene un problema de declive en los suelos, que vuelve difícil mecanizar, por otro lado tiene mano de obra bastante y de costo bajo y fincas pequeñas”, expresó el experto en café.
Para Matiello si se quiere aumentar el potencial de producción de las fincas, el productor no puede continuar con su mentalidad de explotar el café, pues tiene que trabajar para cosechar y agrega que también ocurrió lo mismo en Brasil porque antes era fácil producir, en cambio ahora la roya está afectando duramente.
A los caficultores salvadoreños les sugirió que a corto plazo se debe controlar químicamente hasta que poco a poco se va recuperando y renovando, poniendo nuevos cafetales y podando los actuales, tornarlos más factibles para el control de las plagas, abriendo algunos caminos.
También sugiere, entre otras medidas a corto plazo, practicar el control químico, adecuando el control vía suelo en combinación con la vía foliar, además de combinar con el control de otras enfermedades y plagas.
A corto y mediano plazo propone recuperar y renovar cafetales, con abertura de caminos, podas, raleos de sombra, espaciamientos más amplios y acelerar la sustitución de las variedades susceptibles, con inclusión de nuevas bases genéticas.
El investigador Matiello ha sido invitado a compartir sus conocimientos por la empresa alemana BASF que distribuye productos que combaten la roya y la broca en los cafetales.
José Braz Matiello, considerado uno de los más importantes exponentes de la caficultura mundial, ha sido creador de algunas variedades tolerantes a la roya del café cuando trabajó en la Secretaría de Agricultura en Brasil.
En su vasto currículo se destaca que manejó casi 30 años la investigación de café en Brasil, ha sido asesor de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura y ha asesorado en café como Colombia, Ecuador, Costa Rica, Camerún y Etiopía que han logrado incrementar su producción.